He de empezar esta entrada pidiendo disculpas a mis compañeros blogueros. Últimamente, habréis notado no os devuelvo las visitas a los vuestros estupendos blog. La razón es que, por más que me empeño... no logro sacar tiempo para dedicar un rato y comentar, como lo hacía antes, con vosotros vuestros estupendas creaciones. Lo siento.
En estos momentos tengo poquísimo tiempo para dedicarme... a lo que realmente me gusta... la cocina, pero en absoluto, quiero dejarlo a un lado,... es algo que me gusta muchísimo, aunque, por el momento, no podré bloguear al nivel que lo hacía antes...me es imposible, y de veras que lo siento.
Actualmente me he propuesto, al menos publicar cada quince o veinte días una receta... es mi objetivo: al menos actualizar el blog, de vez en cuando.
Esperando tiempos mejores, les dedico a todos mis amigos blogueros esta receta tradiconal. Va por vosotros!!
INGREDIENTES
- 1 kg. de mejillones grandes.
- Un botellín de cerveza o 150ml. de vino blanco.
- Una cucharada pequeña de pimentón dulce (o semi-dulce).
- Una cucharada de bolas de pimienta.
- Una cebolla grande.
- 3-4 hojas de laurel
- 200g. de aceite de oliva suave (tipo arbequina)
- 50g. de vinagre de vino blanco.
ELABORACIÓN
- Limpiar los mejillones. Una vez limpios, en una cacerola con tapa, los ponemos al fuego con la cerveza o el vino, durante 2 minutos. No conviene que se hagan demasiado. Cuando estén abiertos, separarlos de las conchas con cuidado. En algunos, os daréis cuenta que pueden tener restos del esparto, donde se agarran, debéis quitárselo con cuidado, para no romperlos.Reservar.
Nota: Existen en el mercado unos mejillones grandes envasados al vacío en tupper (recipiente de plástico) que tienen tamaño y calidad para hacer esta receta. Ya vienen abiertos. Prescindiríamos por tanto de este primer paso.
- Cortar la cebolla en juliana y pocharla en la sartén durante unos minutos en el aceite caliente.
- Cuando esté pochada, agregar el resto de ingredientes: pimentón, primero, después las bolas de pimienta, el laurel, y finalmente el vinagre de vino.
- Hervir durante 1 minuto más, y añadirselo a los mejillones que hemos reservado.
- Dejar enfriar.
Nota: Los escabeches suelen estar mejor de un día para otro. Reservar una vez fríos en la nevera.
A DISFRUTAR!!!
En estos momentos tengo poquísimo tiempo para dedicarme... a lo que realmente me gusta... la cocina, pero en absoluto, quiero dejarlo a un lado,... es algo que me gusta muchísimo, aunque, por el momento, no podré bloguear al nivel que lo hacía antes...me es imposible, y de veras que lo siento.
Actualmente me he propuesto, al menos publicar cada quince o veinte días una receta... es mi objetivo: al menos actualizar el blog, de vez en cuando.
Esperando tiempos mejores, les dedico a todos mis amigos blogueros esta receta tradiconal. Va por vosotros!!
INGREDIENTES
- 1 kg. de mejillones grandes.
- Un botellín de cerveza o 150ml. de vino blanco.
- Una cucharada pequeña de pimentón dulce (o semi-dulce).
- Una cucharada de bolas de pimienta.
- Una cebolla grande.
- 3-4 hojas de laurel
- 200g. de aceite de oliva suave (tipo arbequina)
- 50g. de vinagre de vino blanco.
ELABORACIÓN
- Limpiar los mejillones. Una vez limpios, en una cacerola con tapa, los ponemos al fuego con la cerveza o el vino, durante 2 minutos. No conviene que se hagan demasiado. Cuando estén abiertos, separarlos de las conchas con cuidado. En algunos, os daréis cuenta que pueden tener restos del esparto, donde se agarran, debéis quitárselo con cuidado, para no romperlos.Reservar.
Nota: Existen en el mercado unos mejillones grandes envasados al vacío en tupper (recipiente de plástico) que tienen tamaño y calidad para hacer esta receta. Ya vienen abiertos. Prescindiríamos por tanto de este primer paso.
- Cortar la cebolla en juliana y pocharla en la sartén durante unos minutos en el aceite caliente.
- Cuando esté pochada, agregar el resto de ingredientes: pimentón, primero, después las bolas de pimienta, el laurel, y finalmente el vinagre de vino.
- Hervir durante 1 minuto más, y añadirselo a los mejillones que hemos reservado.
- Dejar enfriar.
Nota: Los escabeches suelen estar mejor de un día para otro. Reservar una vez fríos en la nevera.
A DISFRUTAR!!!